El Gran Ducado de Luxemburgo
- Sandra Gabriela
- 17 may 2016
- 3 Min. de lectura
Mi segundo viaje a Europa fue para recorrer Luxemburgo, sí, el Gran Ducado de Luxemburgo, el presupuesto se encontraba muy limitado debido a mi estadía en Chicago y no tener una entrada de dinero fiable, así que después de hacer un exhaustivo presupuesto entre hospedaje, alimentos, transporte y boletos de entrada para Austria, los Países Bajos y Suecia decidí que Luxemburgo es la mejor opción para un viaje breve: 14 días.
La salida fue el 22 de marzo a las 8:50pm en Lufthansa con escala en Frankfurt, confieso que quedé enamorada del servicio que ofrece, al llegar al aeropuerto mi sospecha de la fuerte seguridad que existiría fue acertada, pasamos tres controles de seguridad, los policías me preguntaron mis motivos del viaje y al mencionarles que mi destino final es Luxemburgo me pidieron que fuera muy cuidadosa con mi conexión en Bruselas Gare ( Brussel-Centraal),
no mentiré diciendo ¨no, no me preocupé¨ pero ya estaba en Europa, ya tenía pagadas las habitaciones no, no podía rajarme ahora, el aeropuerto de Frankfurt es enorme y el vuelo en conexión para Ámsterdam se encontraba en uno de los extremos, así que ese transbordo me recordó el de Ermita para la línea dorada, ¨es más fácil que Dios perdone todos mis pecados a que yo pueda terminar el recorrido¨.
En la sala fue esperar unas dos horas y tuve la oportunidad de conocer a dos chilenas que pasarían sus vacaciones con sus hijas que viven en Holanda, por lo mismo de las revisiones de seguridad para la entrega del equipaje no me fue posible tomar el último tren de Ámsterdam (Schipohl,) a Luxemburgo con conexión en Bruselas, así que me fui a Rotterdam a pasar la noche (además de acercarme más a Luxemburgo), en el hostal Hostel Ani & Haakien
(segunda vez que me hospedo), partí al siguiente día, a las 8:10 am rumbo a la Ciudad de Luxemburgo, el boleto me costó 60 euros (sencillo) y sí, en la estación central de Bruselas aparte de estar llena de policías se sentía un ambiente de tensión.
Llegue a Luxemburgo a las 12:30pm, la mayor parte del viaje me quedé dormida (entre el cansancio de una cruda etílica que me di con mis amigos a mi regreso de Chicago a México y mis cortas horas de sueño por la desorganización de mi maleta y otras cuestiones de urgencia por resolver antes de dejar del País ), pero al llegar a la estación central de Luxemburgo me fui
directo a la oficina de turismo que se encuentra dentro de la estación a surtirme de mapas y comprar la tarjeta de la ciudad, con esa chulada uno tiene acceso a todo el transporte público del Gran Ducado y las principales atracciones o sitios que visitar, la tarjeta tiene un costo de 27 euros y es válida por tres días, las fechas de uso se escriben con pluma, con el ¨equipaje surtido¨ me fui directo a la plataforma para ir a conocer mi primer sitio Patrimonio de la Humanidad en Wiltz, a una hora y media de la ciudad.
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